Sitios en la Guerra de Independencia

Zaragoza y Gerona

La pieza es una figura plana modelada por Antonio Zapatero para el Concurso el Soldat de Plom del año 2012. Representa una escena del cuadro “Las heroínas de Santa Bárbara” de Ramón Martí Alsina. La pinté para regalársela a mi hija, Natalia Labourdette. Posteriormente, la figura tomó el avión y viajó a Berlin donde decora la pared de la habitación de la residencia en la que se aloja.

“En la lucha patriótica que Zaragoza sostuvo contra las tropas francesas durante la Guerra de la Independencia, el barrio de San Miguel jugó un papel destacado. La parroquia de San Miguel se situaba en la época de los Sitios inmediata a una de las puertas de la ciudad, la llamada puerta Quemada. Por aquí entraron los franceses durante el primer sitio, librándose encarnizadas luchas casa por casa. El barrio quedó prácticamente deshabitado, incluso la imagen de su popular Cristo se trasladó a la cercana iglesia de la magdalena para protegerlo.”

“Una semana después de haber sido nombrado Palafox cabecilla de la defensa de la ciudad, se cantó en la iglesia de San Miguel una misa rogativa, pidiendo por la salud y acierto en el gobierno del General Palafox.”

“Durante el segundo Sitio se colocaron dentro de la iglesia dos cañones con dirección al puente de San José sobre el río Huerva, para defender esta entrada de la ciudad.”

“Contigua a la plaza de San Miguel se encuentra la calle del Heroísmo donde se riñeron brutales batallas cuerpo a cuerpo entre sitiadores y sitiados. Antes de los sitios se llamaba calle Quemada, por ser el lugar de reunión del gremio de carboneros, que ennegrecían con sus braseros encendidos las paredes vecinas.”

“Al final de la calle se situaba una de las puertas de la ciudad, la también llamada puerta Quemada. Esta calle cambió su nombre tras los asedios por Heroismo, recordando la resistencia de los patriotas zaragozanos.”

Estos fragmentos fueron recopilados en los alrededores de la parroquia de San Miguel durante un maravilloso fin de semana, en Zaragoza, en septiembre del 2015, con Bibi y nuestra hija Natalia en compañía de nuestros buenos amigos Vicente, Amparo y su hijo Vicente y Roque, Luisa y sus hijos Marco y Elisa.

La feroz resistencia de las ciudades de Zaragoza y Gerona se encuadra entre los acontecimientos más representativos de la Guerra de Independencia, la Guerra del pueblo, denominada así pues fue la población civil, ante la pasividad de las Autoridades y los altos cargos militares quien tuvo que tomar las armas para la defensa de España sorprendiendo a propios y extraños con acciones que pusieron en contra las cuerdas, e incluso infringieron grandes derrotas a los poderosos ejércitos de Napoleón.

En Zaragoza y en Gerona las tropas de ocupación del Primer Imperio de Napoleón Bonaparte se enfrentan a las fuerzas del ejército español y la población civil.

En las dos ciudades se suceden y ensalzan muchas hazañas, con gran número de héroes, dando lugar a las más variadas leyendas. Los hechos en ellas acaecidos sirvieron para elevar la moral de los españoles que, vieron factible la idea de expulsar a las tropas invasoras de nuestro país.

Los acontecimientos han sido la inspiración de muchos escritores, pintores, músicos, escultores, directores de cine, etc. y, hoy día, son parte del legado turístico de las ciudades que los sufrieron.

Zaragoza

Ciudad clave en las comunicaciones y el abastecimiento de las tropas en Cataluña, ocupa una posición geográfica imprescindible para La Grande Armeé.

14-junio-1808 /13- agosto-1808:

Tras la sublevación del Dos de Mayo en Madrid, Zaragoza se levanta contra los franceses. El general francés Lefebvre comienza el sitio de la ciudad. Las tropas napoleónicas son superiores en número y armamento pero Zaragoza resiste.

La brillante y férrea defensa llevada a cabo por el general Palafox ha permitido superar todos los ataques enemigos. Lefebvre es sustituido por el general Verdier.

Después de un mes de contínuo bombardeo francés, Verdier manda un mensaje a Palafox: “Paz y capitulación”. El interpelado responde con un desafiante:  “Guerra y cuchillo”. Francia, obligada a atender varios frentes,  se ve obligada a levantar el asedio.

21-diciembre-1808/ 21-febrero-1809:

Los franceses reanudan el sitio con mayor número de efectivos. Se ofrece una feroz resistencia al francés pero, la ciudad, diezmada por la guerra y la enfermedad no puede aguantar más. La escasez de alimentos y el bombardeo constante logran minar la moral y la resistencia de la población.

El 1de febrero de 1809 el ejército enemigo entra en Zaragoza, la lucha no ha cesado. Se pelea entre las ruinas, casa a casa, cuerpo a cuerpo y palmo a palmo. Sin la aprobación de Palafox se produce la capitulación. Han muerto 58.873 sitiados.

Palafox fue hecho prisionero y conducido a Vincennes donde permaneció hasta diciembre de 1813, liberado gracias al tratado de Valençay. Posteriormente, en 1822, fue nombrado Capitán de alabarderos por Fernando VII y, en 1834, duque de Zaragoza por Mª Cristina de Borbón. Murió en 1847.

Gerona

Junio-1808

En el primer asedio es rechazado un ejército de 5000 franceses al mando del general Duhesme.

22-julio-1808/16-agosto-1808

Vuelve Duhesme con un contingente de 11000 efectivos, establece un nuevo sitio. Ante la resistencia organizada por Alvarez de Castro, gobernador militar de la ciudad,  es obligado a retirarse a Barcelona.

6-mayo-1809/12-diciembre-1809

Siendo Gerona un enclave imprescindible para las comunicaciones con Francia, Napoleón encarga al general Saint-Cyr la sumisión de Cataluña. Comienza el tercer sitio de Gerona. Saint-Cyr  no consigue entrar en la ciudad, sus ataques son rechazados una y otra vez y, por ello, es sustituido por el Mariscal Augerau.

Al mando de un ejército de 18000 hombres somete la ciudad a un continuo bombardeo. Álvarez de Castro, con los pocos militares y civiles que están en la ciudad, organiza la defensa, otra vez.

Ante la disminución de defensores, a finales de junio, se ordena al Regimiento de Saboya entrar en la ciudad, tienen que atravesar las líneas francesas en un ataque a bayoneta calada.

El castillo de Montjuich, enclave fundamental para la defensa de la ciudad, es tomado en agosto. A pesar de ello Gerona resiste, se construyen barricadas, obstáculos y trincheras por toda la ciudad para dificultar la entrada de los napoleónicos. Poco a poco Gerona se va convirtiendo en un montón de ruinas y en un cementerio para sus habitantes.

Durante siete meses, las baterías francesas disparan 60000 balas de cañón. El hambre y la peste causan estragos entre los defensores, la ciudad ha mantenido en jaque a la Grande Armée.  Álvarez de Castro también cae enfermo, convoca a los supervivientes y deciden capitular, han llegado al límite.

El 10 de diciembre la resistencia es imposible y se produce la rendición. En el asedio han caído, entre víctimas de la guerra y de la enfermedad o el hambre, unas 10000 personas (soldados y civiles) en la ciudad y unos 15000 franceses de las tropas de asalto.

Alvarez de Castro, enfermo de peste y paralítico, es apresado y trasladado al castillo de Figueras. Muere el 22 de enero de 1810.

Alejandro Labourdette