Planes de batalla
Personajes históricos
Robert E. Lee: Clásica imagen de este personaje con su pelo y barba totalmente blancos. Viste levita y pantalón de color gris, lisos sin distintivos de rango. A un lado de la escena dirige la planificación de la batalla.
Lee asume el mando del ejército de Virginia del Norte en 1862, lanzando una victoriosa ofensiva – Los Siete Días de Lee- en la que rechazó la amenaza del ejército federal del Potomac sobre Richmond. Más tarde derrota a Pope en la segunda batalla de Manassas. En Gettysburg, 1-3 julio de 1863, es donde sufre su primera derrota importante quedando su ejército muy diezmado.
En febrero de 1865 se convierte en el comandante en jefe de las tropas de la Confederación. Para proseguir la lucha trata de unir su ejército con el de Johnston. Es cercado y se ve obligado a rendirse. El 9 de abril de 1865, ante Ulysses S. Grant, en Appomattox, se produce la firma del cese de hostilidades. Tras la guerra, Lee es uno de los principales abogados de la reconciliación nacional.
JEB Stuart: Una figura deslumbrante por su frondosa barba y su forma de vestir algo extravagante, chaquetilla corta de doble botonadura, banda dorada y sombrero engalanado con plumas de avestruz. Apoya la mano en su sable mientras informa del reconocimiento realizado sobre el ejército de la Unión. Su característico gabán con el forro rojo descansa tras él, sobre un banco. Su magnética personalidad y su inagotable energía le valieron el gran respeto que sus tropas le profesaban.
General de brigada a cargo de la caballería del Ejército de Virginia del Norte, Stuart es reconocido como los “ojos y oídos” del ejército confederado por su gran habilidad en el reconocimiento del terreno. En Gettysburg no fue capaz de informar adecuadamente sobre las posiciones de las tropas de la Unión y, por ello, se le culpa parcialmente de la derrota.
Stuart fue herido de muerte en la batalla de Yellow Tavern en 1864 y murió a la edad de 31 años.
Otros personajes (no históricos)
Andrew F. Miller, Oficial de artillería. En el centro de la escena fuma en pipa y, mientras expulsa volutas de humo, observa la situación pendiente de donde disponer su artillería para infringir el mayor daño posible al enemigo. Viste levita y se cubre la cabeza con el quepis rojo, color característico del arma de artillería.
Frederick Green, General de caballería. Con sombrero, botas altas de montar y chaquetilla corta. Entre Lee y Miller observa el mapa apoyando el pie en una caja de madera. Espera órdenes para dirigir a sus jinetes en la batalla.
Lewis Henderson, Coronel de infantería. Arrogante figura fumando un enorme puro. Con levita gris y sombrero negro, desde una posición algo alejada, a la izquierda de la escena, estudia el mapa de la zona y la mejor disposición de sus regimientos de infantería.
Estrategia militar: Planteamiento general, movimiento y disposición de tropas, utilizado por las organizaciones y jefes militares para intentar alcanzar los objetivos fijados. El objeto de la estrategia será el de concebir un plan para acabar con el enemigo.
DESARROLLO DE LA ESCENA
7 de la mañana de un día de septiembre de 1862, reunidos en torno a una mesa, con el mapa de la zona desplegado, una cafetera, varias tazas y botellas con algunos vasos. Cinco oficiales confederados planean la próxima batalla.
El General Lee toma la palabra y se dirige a Stuart.
– General Stuart ¿Qué ha descubierto en su reconocimiento?
– El grueso de las tropas de infantería yankees está a unas cuatro millas avanzando por un camino que atraviesa aquel pequeño bosque, –informa Stuart-. Su artillería está mucho más retrasada y no nos supondrá ningún peligro.
Robert Lee necesita más información.
– ¿No hay tropas de caballería? General Stuart, usted es nuestros ojos y oídos y confiamos en sus informaciones para el desarrollo de la contienda.
– Si General –afirma Stuart- Un pequeño destacamento de caballería federal en una granja al este del bosque. He pensado que el General Green puede dar un rodeo, por detrás de esta loma de aquí, -señalando en el mapa- y atacará a los yankees, pillándolos desprevenidos y neutralizándolos completamente. ¿Qué le parece general Green? ¿podrá tenerles entretenidos el tiempo suficiente?
– Con la mitad de los jinetes creo que será suficiente. Si actuamos rápido no tendrán tiempo para reaccionar –replica Green convencido.
– ¿A qué hora prevé usted que llegará la infantería a este valle? –insiste Lee a Stuart
– En algo más de un par de horas, tres a lo sumo, estarán aquí. –afirma rotundo JEB Stuart-Los veremos asomar por aquel bosquecillo, siguiendo el camino y tendrán que cruzar el puente sobre el río. Puedo avanzar con el resto de la caballería por el flanco izquierdo del enemigo y…
Lee no le deja terminar y le completa sus órdenes:
– Cruzará el río por el vado que se encuentra un par de millas aguas abajo y le quiero dentro de una hora y media hostigando a su infantería. Debe rodear al ejército federal con su caballería para apoderarse de sus suministros y destrozar sus líneas de comunicaciones.
Stuart estaba deseando hacer algo así para demostrar que seguía siendo el mejor oficial de caballería de la Confederación.
– General Green, una vez neutralizada su caballería. ¿Podría ayudar a Stuart? –pregunta Lee.
– Si conseguimos atraparlos por sorpresa y los anulamos – contesta Green – podemos volver grupas para hostigar a su infantería por la retaguardia de su flanco derecho y así, ayudar a dirigirlos por el camino adecuado.
– General Stuart, General Green en breve estarán ustedes en una posición fuerte para proteger a nuestros regimientos de infantería, confiemos en que las operaciones planteadas resulten propicias a nuestros intereses – sentencia Robert Lee.
Cuando los federales estén al otro lado del río van a ver nuestros preparativos, si yo fuera su general no presentaría batalla aquí, dirigiría mis tropas aguas arriba e intentaría aparecer por detrás de nuestras líneas para atacarnos en un terreno más propicio – manifiesta el general Henderson preocupado.
Tiene usted razón -contesta Lee- pero el enemigo está sufriendo presiones del gobierno de Washington que exige una acción rápida. Además, los periódicos están deseando publicar una gran victoria que eleve la moral de los suyos. Sus mandos militares están sometidos a un excesivo control externo de periodistas y políticos. Hágame caso, en cuanto nos vean plantearan batalla, atacaran avanzando por ese puente.
Táctica militar: Es la correcta ejecución de las maniobras de las fuerzas de combate durante la batalla. Requiere el empleo de las tropas para tomar ventaja frente al adversario tanto en situaciones de ofensiva como en la defensa.
Lee toma de nuevo la palabra para desarrollar la táctica de la próxima batalla con la infantería federal.
– Los yankees se acercan y vamos a ponérselo difícil, debemos mantener esta colina, es imperativo – dice Lee mientras señala de nuevo una zona del mapa frente al río.
– Miller, ¿Qué le parece aquella elevación frente al puente para su artillería? – pregunta Lee indicando con el puntero en el mapa.
– Puedo colocar cuatro piezas sobre la loma y otros dos cañones a su izquierda, cubriendo el camino. – explica Miller expulsando una gran bocanada de humo de su pipa – calculo que el puente se encuentra a unos 800 metros y puedo bombardearlo con proyectiles utilizando mecha de 5 segundos.
– Perfecto, cuando les vea en la otra orilla, hostigados por nuestra caballería en su retaguardia, empieza usted con su bombardeo y durante 15-20 minutos les lanza todos los proyectiles que pueda. Acribíllelos – ordena Lee – Disponga otro par de cañones en aquellos árboles y así cubriremos todo el campo abierto.
– Intentaremos tener acorralado al enemigo, el máximo tiempo posible, en la orilla del río a este lado del puente – asegura Miller – Les vamos a lanzar todo lo que tenemos antes de que actúe nuestra infantería.
– Lee observa el mapa – Tenemos baterías cubriendo todos los ángulos, cuando crucen aquel puente tendrán que hacerlo despacio y les daremos por todos lados. Les va a costar caro atravesar ese campo. Posteriormente nuestra infantería acabará con lo que quede de ellos.
Miller se marcha para transmitir las instrucciones necesarias a su artillería de tal forma que queden dispuestos los cañones prestos para el bombardeo.
– Coronel Henderson, – Lee da las órdenes a la infantería- deberá disponer a los hombres a la izquierda de la artillería de Miller. Una vez terminado el bombardeo, avanzará con ellos para rematar al enemigo que se encontrará en aquella zona descubierta con el rio a su espalda.
Henderson explica la disposición en la que va a colocar a las tropas.
– Si le parece, General Lee –explica Henderson – podemos disponer al tercer regimiento a la izquierda, junto al decimoséptimo. La posición está apoyada por el coronel Teiler y el flanco y detrás el coronel Brand refuerza su posición.
Henderson, mientras reflexiona imaginando sobre el mapa los movimientos de la infantería, bebe un poco de café y da una profunda calada de su puro.
– Hemos construido un camino por detrás de las líneas por si fuera necesario mover las tropas -continua Henderson- Si el enemigo corta por el centro o presiona el flanco izquierdo podremos cambiar de posición con rapidez. Si hacemos bien nuestro trabajo, el día de hoy nos será propicio y el enemigo sufrirá una importante derrota.
– Caballeros estas posiciones son buenas – concluye Lee – el resto está en manos de Dios.
Alejandro Labourdette