Busto Sikh. Ejército Indio 1914 (I)
El ejército de la India, entre los años 1903 a 1947 estaba dividido en dos fuerzas separadas: el Ejército Indio y el Ejército Británico. El primero estaba integrado por regimientos reclutados en la India, junto con oficiales expatriados británicos, y que estaba establecido de forma permanente allí. El segundo se componía de regimientos originarios del Reino Unido que eran enviados a la India para cumplir su servicio, siendo después relocalizados en otras partes del imperio o devueltos al Reino Unido.
El Ejército Indio se formó después de la rebelión de la India de 1857, cuando la corona estableció el gobierno directo suplantando a la Compañía Británica de las Indias Orientales, que tenía su propio ejército, pagado con sus beneficios.
El ejército de la Compañía reclutaba principalmente Hindúes de casta alta en las ciudades de Bengala, Bihar y Uttar Pradesh. Estas tropas fueron predominantes en la rebelión debido al trato extremadamente duro que recibían por parte de los oficiales británicos. Después de la rebelión el reclutamiento cambió de política a lo que los británicos llamaron las «razas marciales», particularmente sikhs, gurkhas, pashtuns, garhwalis, mohyals, punjabi musulmanes y dogras.
La principal función del Ejército Indio era vista como la defensa de la frontera del Noroeste frente a una invasión rusa vía Afganistán, la seguridad interna, y la guerra expedicionaria en el Océano Índico. Estaba compuesto de unos 150.000 hombres en 1914.
Fue durante la Primera y Segunda Guerra Mundial cuando el Ejército Indio se mostró tremendamente útil como fuerza adjunta a los ejércitos británicos, no sólo en la India, sino también en otros lugares.